La propuesta para la museografía del nuevo MRA, nace de la observación del territorio geológico, geográfico y humano. Se fusionan y dialogan capas espaciales diversas tanto en el sentido longitudinal como en el transversal, generando 3 ejes espaciales que dan cabida al guión y a la diversidad de temáticas contenidas en él.
Un eje que habla de lo Basal en la extensión horizontal, como primer horizonte expositivo; un Segundo eje que habla de lo Monolítico Geológico como segundo horizonte expositivo y un tercer eje que habla de la extensión densa no habitable del cielo diurno y nocturno como un tercer horizonte expositivo. 
En la conjunción de estos 3 ejes se dan los asentamientos humanos, hundidos, relevados y acogidos por lo monolítico y cubiertos por la capa densa y de permanencia del cielo. En esta combinación de capas coexiste el pasado arqueológico, geológico y paleontológico así como el pasado, presente y futuro minero y también la complejidad histórica del territorio humano.
Desde esta visión se propone que la ocupación de las salas, el recorrido y la propia exposición contenga el espesor y los quiebres geométricos de la extensión habitable, expresado espacialmente como elementos de peso visual y de materialidad mineral, que exponga y contenga la diversidad de texturas y estratos. Estos elementos, desde lo expositivo, contendrían colecciones, elementos interactivos y gráficos
Back to Top